29.3.12

El cine de Jesús

De cómo el celuloide ha tratado la figura de Jesucristo

Desde que el cine dejó de ser simplemente un reflejo de lo que ocurría delante de la cámara, desde que se decantó por contar historias, por buscar argumentos y personajes, la religión cristiana fue una de las principales fuentes de las que se ha nutrido el séptimo arte. Y es un hecho que Jesucristo es uno de los personajes que más veces ha sido llevado a la gran pantalla, en ocasiones con películas que poco tienen que ver con su vida, creando controversias, polémicas y escándalos. 
Aunque en todos los países de tradición cristiana se han realizado versiones de la vida de Jesús, las más conocidas de la historia suelen ser las de Hollywood, por su dominante posición en la industria fílmica del planeta, sobre todo desde que las guerras mundiales detuvieron (o ralentizaron) la producción europea. Pero no siempre fue así, y hay excepciones. 

En los primeros años de la historia del cine ya se realizaron varias cintas que contaban la historia de Jesús. Ya los creadores de este arte, los Lumiére, hicieron su propia versión de Vida y pasión de Jesucristo, aunque parece ser que la primera de todas fue La Passion du Christ, dirigida en 1897 por Léar y Basile y rodada en París. Del mismo año son la italiana La Passione di Gesú y la inglesa The Sign of the Cross
Durante los primeros años del siglo XX fueron muchas más las películas en las que Jesús era el personaje protagonista (a veces secundario) de la historia, algunas dirigidas por nombres importantes como George Méliès o Ferdinand Zecca. Este último dirigió La Passion de Notre-Seigneur Jésus Christ, producida por Pathé, inspirada en los grabados de Gustav Doré, con planos fijos y que fue coloreada a mano fotograma a fotograma. Sus efectos especiales eran rudimentarios pero bastante efectivos y la cinta fue un éxito de tal calibre que todavía se seguía proyectando en 1925, casi dos décadas después de su estreno. 
Aunque el primer acercamiento importante a la vida de Jesús no se rodó hasta 1915. Se trata de Christus, cinta italiana que destacaba por su novedad de rodaje en exteriores, con grandes masas y escenografía basada en las pinturas de Rafael o DaVinci. Destacables también en estos años son, Intolerancia (1916, de David W. Griffith), y Rey de Reyes (1926, Cecil B. DeMille), espectacular superproducción que sólo buscaba el espectáculo, estrenada poco antes de la llegada del sonoro, y en cuya última escena (la resurrección) se usaba la entonces novedosa técnica del Technicolor. 

De los años dorados del Hollywood clásico proceden los filmes más conocidos que se rodaron sobre el tema. Casi todas son superproducciones, por ejemplo, Rey de Reyes (1961, Nicholas Ray), rodada en España, con Carmen Sevilla como María Magdalena, argumento de Ray Bradbury, y que es relativamente fiel a los textos. O también La historia más grande jamás contada (1965, George Stevens), que busca la estética y la espectacularidad, aunque sea a base de manipular y modificar los Evangelios. Para muchos no deja de ser “una de romanos” con un reparto espectacular (y John Wayne haciendo una pequeña aparición como centurión). 
Algo anteriores son La túnica sagrada, (1953, Henry Koster) y Ben-Hur (1959, William Wyler), donde el personaje de Jesús es apenas una presencia, una sombra, una voz o una mano amiga que ofrece agua. 
En otros países la imagen de Jesucristo también se ha tratado, en ocasiones incluso con mayor acierto que en cintas más reconocidas. Por ejemplo, en Francia, Julien Duvivier rodó una meticulosa adaptación del evangelio de San Mateo en 1935, Gólgota. Aunque quizás la película más cercana a la austeridad que reflejaban los evangelios la realizó un ateo marxista italiano como Pier Paolo Pasolini: El Evangelio según San Mateo, en 1964, cinta rodada con cámara al hombro, con una sorprendente escasez de medios y con una ambientación muy simbólica. El personaje de Jesús lo interpretó el estudiante español Enrique Irazoqui. 
Diez años después, Roberto Rossellini rodaría para televisión El mesías, al igual que la anterior, con actores no profesionales. El director neorrealista reflejó un Jesús muy humano, lejos de lo milagroso. 
Y poco después, Franco Zeffirelli haría Jesús de Nazareth, que es una de las más vistas y conocidas cintas sobre la vida de Cristo. Superproducción cuyo rodaje duró dos años, alabada por la iglesia católica italiana, pero criticada por los puritanos por mostrar a un Jesús demasiado humano, y por la izquierda y la crítica que la acusaban de ser demasiado edulcorada. 
Otras visiones diferentes fueron las que aportaron el danés Carl Theodor Dreyer y el español Luis Buñuel, quienes afrontaron la figura de Jesús desde una perspectiva contemporánea, trasladando al personaje al presente. El primero, con Ordet (1954) y el segundo con Nazarín (1958), rodada en su exilio en México. 

En nuestro país también se han rodado varias cintas a lo largo de los años. Ejemplos hay muchos: El Judas (1952, Ignacio F. Iquino), El beso de Judas (1953), El canto del gallo (1955, ambas de Rafael Gil), Proceso a Jesús (1973, José Luis Sáenz de Heredia), Así en el cielo como en la Tierra (1995, José Luis Cuerda), o El discípulo ( 2010, Emilio Ruiz Barrachina). 

En el estreno de esta última, uno de los asistentes llamó al director 'anticristo'. El hecho quizás viniera motivado por la visión que se da del protagonista en la cinta, una imagen bastante alejada de la acostumbrada, ya que Jesús aparece como un líder espiritual armado y partidario de la violencia. 
No ha sido esta (en un tema tan peliagudo como la religión es obvio) la única polémica que se ha suscitado a lo largo de la historia. En 1916 D.W. Griffiths tuvo que cortar parte del metraje y, modificar otras, de Intolerancia por las protestas de grupos de judíos, ya que en la película los presentaba como culpables de la muerte de Jesús. Así, en el montaje final eran los romanos quienes lo llevaban a la cruz. Lo mismo le ocurrió a DeMille y su Rey de Reyes (1926). También recibieron críticas y protestas El Evangelio según San Mateo, Rey de Reyes (la versión de Ray), o Gólgota
Asimismo, versiones algo diferentes de la vida de Cristo, como el musical Jesucristo Superstar (1973, Norman Jewison), el musical basado en la obra de Broadway, por la adaptación libre de textos, lugares y situaciones, por demasiado terrenal y presentar a Jesús como una estrella de rock, y también se vieron connotaciones racistas en el hecho de que Judas fuese negro. O la versión irreverente que hicieron los Monty Phyton en La vida de Brian, que recibió el aplauso de público y crítica. 
No obstante, las mayores polémicas han sido las ocasionadas por dos cintas: La última tentación de Cristo (1988, Martin Scorsese), que escandalizó al orbe católico y provocó protestas en los cines donde se proyectaba, al presentar a Jesús sucumbiendo a la tentación, imaginándose casado con María Magdalena y presentando una breve escena de sexo. 
La otra es La Pasión de Cristo (2004, Mel Gibson), quizás la más sangrienta de las visiones que se hayan realizado sobre los últimos días de Jesús. Fueron numerosas las voces que se alzaron en su contra, tildándola de antisemita, sensacionalista, integrista e innecesariamente violenta, recreándose en lo morboso, con un exceso de sangre y dolor. Aunque, para muchos, sigue siendo la versión más verosímil de todas.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola a todos! necesito información sobre un film: "Mattheu the Visual Bible" año 1985, no tengo mas data. Alguien sabe algo al respecto? Gracias..

Anónimo dijo...

Es el evangelio de Mateo pero no la de Pasolini ok? esa es de año 1964. Yo busco la del año 1985. Gracias de nuevo..

jahidalgo dijo...

No conozco la versión de 1985. Conocía la existencia de una tv-movie del 93 (http://www.imdb.com/title/tt0301359/), pero no tengo la más mínima idea de la que mencionas. Lo siento.