SFC - SECCIÓN OFICIAL____________________ DÉJATE CAER

Esperando en el banco

españa, 2007.
escrita y dirigida por: jesús ponce. producción: álvaro alonso, fernando de garcillán. fotografía: daniel sosa. música: juan cantón. montaje: fernando franco. intérpretes: iván massagué, dario paso, juanfra juárez, pilar crespo, mercedes hoyos, ana cuesta, isabel ampudia, benito pocino.

La primera película española que compite en la sección oficial del Sevilla Festival de Cine (a menos que me falle la memoria y se me olvide alguna), viene de manos, precisamente, de un sevillano como Jesús Ponce, que se ha inspirado en sus recuerdos de la plaza de su barrio, en Pio XII, para realizar esta su tercera película (tras un prometedor debut, con Quince días contigo, y un trabajo de encargo, Skizo). Aunque la verdad es que esa plaza podría estar en cualquier ciudad del mundo.

Nandi, Roberto y Grabi rondan ya la treintena, pero siguen pasando el tiempo sentados en la plaza de su barrio, con una cerveza en una mano, y una palmera de chocolate en la otra. Allí pasan las horas, los días, viendo pasar el tiempo. Ya tienen suficiente edad como para saber que deben tomar una decisión en sus vidas, que deben hacer algo. Buscar un trabajo, una novia... algo. Pero también son lo suficientemente inmaduros como para saber cómo hacerlo. Y así ven pasar los días, entre chistes, bromas y litronas. La aparición de Sunci, una chica dispuesta a formar pareja con Roberto, romperá el equilibrio que existía en sus vidas, y precipitará sus futuros, obligándoles a tomar una decisión que dirija sus vidas hacia algún tipo de futuro.

Déjate caer es una historia universal. En todas las ciudades hay un barrio con una plaza que tiene un banco en el que están sentados tres chicos perdidos, sin futuro, incapaces de decidirse a dar el paso necesario para buscarlo. Y Jesús Ponce sabe mostrarlo con humor. Aunque, como bien dijo él mismo en la rueda de prensa del filme "para lo que el espectador es una comedia, para los personajes es un verdadero drama personal".

Las interpretaciones están fantásticas, son personajes fácilmente reconocibles (casi todos habremos conocido a alguno de ellos, o a más de uno) y Ponce demuestra que sabe lo que hace, el espectador no tiene dificultad alguna para entender y entretenerse. Incluso podría tener una buena carrera en la taquilla gracias al boca a boca (es de esas películas que no va a tener una gran campaña publicitaria que la avale, pero que se va a ver ayudada por los comentarios de unos espectadores satisfechos).

Sin embargo, no hay que olvidar que estamos en un festival de cine que quiere ser importante, y esta película no es de las que debería estar en una sección oficial a concurso (hay más, todos los años hay varias cintas que uno se pregunta cómo ha podido llegar a pasar la criba...), aunque calidad y calidez no le faltan y será un éxito, si bien no como los bombazos taquilleros de Hollywood, sí como para ser tenida en cuenta.