7.11.06

SEVILLA FESTIVAL DE CINE – SECCIÓN SHOOTING STARS MILA DE MARTE

Extraña en tierra extraña

bulgaria, 2004.
título original: mila ot mars. directora: sophia zornitsa. producción: s. zornitsa. guión: s. zornitsa. fotografía: rumen vassilev. música: roumen toskov. montaje: alexander etimov, nina kirova. intérpretes: vessela kazakova, assen blatechki, zlatina todeva, lubomir popov, yordan bikov, vassil vassilev.


Mila es una chica de dieciséis años. Está embarazada y acaba de descubrir que su chico es una persona peligrosa. No sólo porque le ha agredido, sino porque se dedica a asuntos turbios. Entonces decide escapar, aunque sabe que él la buscará donde sea, “aunque te vayas a Marte”. En su huída llega a una pequeña aldea fronteriza, habitada sólo por nueve ancianos. Pronto descubrirá que los lugareños sobreviven cultivando marihuana, y que el dueño de la plantación es, precisamente, el hombre del que huye. Pero decide quedarse allí, y su decisión cambiará para siempre su vida, aunque no por el lado que ella esperaba.
La cinta, que forma parte de la sección Shooting Stars, en la que representa a Bulgaria, nos sumerge en un mundo imaginativo e ingenuo. La chica causa una conmoción contenida a los habitantes del pequeño poblado al que va a parar, ya que nunca habían visto nada parecido (esas vestimentas con las que Mila llega...) y también ocurre lo mismo a la inversa, la chica jamás se habría imaginado que unos viejecitos tan adorables se dedicaran a lo que se dedican.
La protagonista, Vessela Kazakova, que se paseó por Sevilla con su escaso (pero suficiente) español, es uno de los grandes talentos de Bulgaria. Pese a su juventud, es toda una celebridad de los escenarios teatrales, en los que es muy conocida no sólo como actriz, sino como autora, compositora y directora de producción. En su corta carrera (debutó en el cine en 2002) ya ha cosechado varios premios por su trabajo. Por ejemplo, por esta Mila de Marte ganó el trofeo a la mejor actriz en el Festival de Cine Búlgaro en 2004.
Película divertida, con cierto toque ingenuo, y que verdaderamente hace pasar un rato muy agradable, haciendo inevitable que al salir de la sala la sonrisa no esté en nuestros rostros.

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